sábado, 29 de noviembre de 2014

Sentiemeinto emocional, más que una fórmula

El día que vi la fórmula del sentimiento emocional, llegué a sentir escalofrío, carajo!!! Grité si tan solo la hubiese leído 2 días antes le hubiera ahorrado a mi cerebro una gran cantidad de esfuerzo, carga y esfuerzo negativo. Acababa de tener una discusión bastante fuerte con mi novia, estaba fuera de mí, estaba esclavo de mi amígdala le permití a mi ira, mi miedo, mi angustia fluir tan libremente como la lava volcánica que carcome el terreno a su paso luego de la explosión de un volcán de una gran magnitud. Como es de suponer tal como lo evidencian los vestigios de la explosión de un gran volcán, el resultado de tal evento una estela de destrucción evitable. Que me iba yo a imaginar en ese momento que la formula: Emoción + Pensamiento = Sentimiento Emocional, significaba que lo que sentimos puede llegar a depender de una toma de decisiones en nuestro “pensar” y que ese pensar puede actuar como sumando a la respuesta fisiológica de la emoción pura, y que mas allá de eso significaba que podemos llegar a ser emocionalmente inteligentes y que esa etiqueta cognitiva que representa el pensamiento puede llegar a ser el trazado del sendero que nos conduce hacia nuestra felicidad. Me preguntaba, que hubiese ocurrido si en aquella ocasión, envés de desatar toda mi retahíla de expresiones recriminantes me hubiese puesto en los zapatos de mi novia y e hubiese detenido a pensar las causas que la llevaron a cometer el acto que me enfureció tanto, me di cuenta que efectivamente me hubiese podido ahorrar una gran dosis de sufrimiento si me hubiese despojado de mi soberbia por un momento y me tomaba la molestia de a analizar un poco más a fondo las causas por las cuales se presentó el incidente y al hacer un detalle de cada una de esas causas habían por lo menos 5. La soberbia se convierte una la barrera mas poderosa para el proceso de iniciar el autoconocimiento, nos nubla completamente La autoconciencia es el pilar fundamental sobre el cual se sostiene el principio de la empatía, tal como lo menciona Daniel Goleman, el principio esta basado en las competencias emocionales de: Conciencia emocional, autovaloración, autoconfianza, autocontrol, confiabilidad, conciencia, adaptabilidad e innovación. Llegar hasta allá no es nada sencillo, se requiere de un profundo autoconocimiento un proceso de introspección reglamente interesante y cautivador pero a su vez peligroso, podemos llegar a chocar con nuestros más profundos demonios y tal vez darnos cuenta que en nuestro interior cohabitan emociones desconocidas que pueden llegar a desestabilizar nuestro estado de “placidez mental” pero si no es de ese modo, de que otro modo podemos legar a nuestra madurez mental y darnos cuenta que antes que nada nuestra felicidad depende de nuestra interacción con nuestros pares, con los seres de nuestra especie y que vivimos en el mundo de causa y efecto descrito por Aristóteles, el efecto de la causalidad en nosotros se percibe de manera latente en nuestros sentimientos los cuales carecen del componente de aleatoriedad. En lo personal, la principal competencia de un gerente debe ser su inteligencia emocional, el hecho de lograr la empatía con su equipo de trabajo es el factor determinante en el resultado exitoso de la compañía el gerente no necesita tener un coeficiente intelectual de 150 para lograr se exitoso, se ha demostrado que los factores de éxito van mucho más allá, combinando la inteligencia emocional con las habilidades de liderazgo se obtiene como resultado un gerente integral y altamente efectivo y eficiente.

Resumen Libro 7 Habitos de la gente altamente eficiente

RESUMEN SIETE HÁBITOS DE LA GENTE ALTAMENTE EFECTIVA Stephen R. Covey El libro presenta una teoría holística compuesta por siete aspectos que se deben desarrollar y fortalecer para enriquecer las habilidades del individuo que puedan ser puestas en práctica en el campo social y profesional. De esta manera haríamos pleno uso de nuestras mejores cualidades permitiendo al hombre alcanzar su máximo potencial frente a las diferentes facetas de la vida. Dicha teoría parte del postulado principal de que debemos -en nuestra capacidad de seres humanos- dejar de lado el actuar bajo la dependencia en otros y movernos hacia la independencia cuidando de nosotros mismos pero procurando que el fin último sea alcanzar una posición de interdependencia. Los tres primeros hábitos que plantea Stephen R. Covey componen la base de las victorias individuales, que a su vez, forman las cualidades de nuestro carácter. Los tres hábitos siguientes hacen referencia a las victorias públicas. El séptimo hábito ofrece la clave para mejorar la efectividad personal en todos los aspectos de la vida. PRIMERA PARTE: Paradigmas y principios El término clave inicialmente es el “Paradigma”. Éste es definido como la forma mediante la cual conocemos e interpretamos el mundo que nos rodea. Los paradigmas que elaboramos controlan nuestra percepción de la realidad y preceden la elaboración de los principios, los cuales se convierten en los lineamientos que rigen el comportamiento. En esta parte se cita un ejemplo relacionado con un estudio experimental llevado a cabo por el autor sobre la interpretación de una imagen con efectos de ilusión óptica, de allí se extrajo la idea de que el ser humano actúa con base en la manera en que cada uno ve el mundo en vez de actuar conforme a como el mundo es en realidad. Para unificar conceptos, Covey sugiere que deberíamos cambiar nuestra metodología de percepción subjetiva a un paradigma basado en los principios, los cuales reúnen: integridad, justicia, servicio y dignidad. Los hábitos se definen como la convergencia entre habilidades para efectuar las cosas, el deseo de incorporarlas, adicional al conocimiento requerido para saber a ciencia cierta qué hacer y cómo hacerlo. Nuestro carácter es la sumatoria de nuestros hábitos. Otro punto importante de resaltar es la felicidad. Según el autor, ésta se determina por nuestra capacidad para sacrificar cosas del presente con el objetivo de ganar algo que queremos en el futuro. Para lograr este objetivo se requiere de un trabajo interdependiente que nos permita el acceso al potencial y los recursos de las demás personas. Si queremos llegar a este nivel es indispensable tener previamente una completa independencia personal; sin embargo; contrario a la concepción que nos ha inculcado la sociedad del individualismo como fin último y máximo estatus de bienestar; las personas que se quedan en la línea de la independencia sin avanzar a la interdependencia, pueden únicamente ser buenos productores. Como solución a lo anterior, Covey propone la búsqueda de un balance entre nuestra productividad conforme a los resultados deseados en relación a nuestra capacidad productiva representado como: P/CP. La incorporación de los siete hábitos propuestos en nuestro diario vivir, nos llevaría a obtener los siguientes beneficios: • Crecimiento de la auto confianza • Un mayor sentido de integridad, identidad, direccionamiento interior y auto control. • Sentido de paz y regocijo • Mejoría en las relaciones personales • Habilidad para redefinir resultados y hábitos indefinidamente SEGUNDA PARTE: Victoria privada  Hábito 1: Ser proactivo: De manera introductoria para presentar éste hábito, se describe el ejemplo de un psiquiatra Judío quien fue prisionero en un campo de concentración Nazi. Él llegó a ser consciente de que la situación por la que atravesaba no podía ser controlable por sus medios, pero eligió tomar el control de como la situación podía afectarlo haciendo pleno uso de sus facultades de memoria e imaginación, llegando a liberarse mentalmente de los acontecimientos del entorno. Los seres humanos son únicos en la medida en que pueden meditar sobre sus propios procesos del pensamiento a diferencia de los animales quienes solamente obedecen a la ley natural de acción y reacción. Covey lo denomina autoconciencia, la cual es el elemento fundamental del paradigma. Ante una serie de estímulos y respuestas, los seres racionales tienen la libertad de elegir su respuesta. Las personas reactivas en cambio se dejan dominar por las situaciones de estrés. Las personas proactivas toman sus decisiones basándose en los valores conscientemente adoptados. Nos es posible desarrollar nuestras habilidades de pro actividad a través de los eventos ordinarios del diario vivir. Nuestra respuesta a pequeños eventos que nos causen irritación determina la manera en que responderemos durante los desastres. La palabra responsabilidad viene de la unión entre respuesta y habilidad, las personas altamente pro activas se destacan por su habilidad de elegir buenas respuestas.  Hábito 2: Comenzar con el fin en mente: Se dice que debemos actuar conforme esperamos que los demás piensen de nosotros luego de nuestra muerte. Para prestar atención a nuestros actos debemos saber que las cosas se crean dos veces: primero en nuestra mente a modo de plan, segundo como creación física de ese plan de acción. El individuo está pre dispuesto a ver el mundo a través de una especie de lente enfocado en nuestro círculo de influencias, que puede ser la pareja, el dinero, el placer o los enemigos. Para lograr una plena evolución de nuestra conciencia debemos deshacernos de los conceptos obtenidos mediante estas influencias porque no son objetivos, y en cambio, crear un centro basado en principios incambiables e independientes del tiempo. Así podremos establecer cuidadosamente un parámetro que será nuestra misión comparando la vida como una empresa y tendremos siempre presente nuestro norte, nuestras prioridades más importantes conforme a las cuales tomaremos nuestras decisiones diariamente.  Hábito 3: Primero lo primero: El aspecto central de este punto está relacionado con la categorización de como empleamos nuestro tiempo y de una manera figurativa como se ubicaría dentro de un plano de cuatro cuadrantes donde los dos ejes son la urgencia versus la importancia. En el cuadrante uno se encuentran las cosas urgentes e importantes, en el dos las importantes pero no urgentes, en el tres las urgentes pero no importantes y en el cuatro las importantes pero no urgentes. Las personas que se dejan llevar por los problemas son aquellas que dedican la mayor parte de su tiempo a las actividades del cuadrante número uno. Las personas altamente efectivas dan prioridad al tiempo y energía invertidos en las acciones del cuadrante número dos. Las claves para lograr este nivel de organización bajo prioridades acertadas tienen que ver con la claridad de las metas propuestas antes de ejecutar cualquier acción, aprender a decir no a actividades del cuadrante 1 y 3 para destinar mayor tiempo a las del cuadrante número 2, administrar el tiempo bajo un plan escrito de logros propuestos con una proyección semanal, concientizarnos de que no podemos pensar eficientemente por los demás, incrementar P/CP a través de la delegación de funciones de manera cooperativista entre los interesados en cumplir con un objetivo dando plena libertad a los demás para actuar de la manera en que se sienten más aptos bajo una serie de condiciones necesarias para una comunicación efectiva. TERCERA PARTE: Paradigmas de la interdependencia Antes de proseguir con los siguientes tres hábitos, el autor establece cinco consideraciones especiales: • Se necesita completa independencia para tener buenas relaciones con los demás. • La confianza en una relación es como el manejo de dinero en una cuenta bancaria, siendo la calidad de los “depósitos” proporcionales a la confianza. • Amar al otro de manera incondicional en una relación. • Los problemas dentro de una relación deben verse como oportunidades de mejora.  Habito 4: Pensar ganar-ganar: Existen seis tipos de paradigmas de interacción humana para asimilar el nivel de éxito individual, los cuales son: Ganar y perder (alguien tiene que perder para uno ser el ganador), Perder para ganar (ceder la victoria para mantener la paz), Perder y perder (actitud típica del vengativismo, no importa perder para que los demás pierdan también), Ganar (pensar únicamente en mis intereses personales), Ganar-ganar (Pensando en el beneficio mutuo), Ganar-ganar o no hay trato (máxima posición sinergista). Para trabajar en la correcta adopción del paradigma ganar-ganar se requiere: integridad en el carácter (principios) y mentalidad de abundancia, relaciones interpersonales estables y de calidad (“cuentas bancarias con suficientes fondos”), acuerdos (enfocarse en los resultados deseados y no en los métodos), sistemas (adoptados en una organización conforme a los logros deseados), procesos (enfocarse en los intereses más que en las posiciones, separar la persona del problema).  Hábito 5: Buscar entender antes que ser entendido: Es indispensable dejar de lado la costumbre de escuchar a los demás con la intención de replicar, debemos más bien escuchar con una profunda intención de entender al interlocutor. Existen cinco niveles de escucha: Ignorar, aparentar, escucha selectiva, escucha atenta, escucha empática. Allí se da el ejemplo de como un padre escucha a su hijo sin salir de sus propias ideas en comparación con el mismo caso en que el padre escucharía de manera comprensiva. Las habilidades indispensables para una comunicación empática son: ser capaz de repetir lo escuchado, entender y poder frasear el mensaje, reflejar el sentimiento bajo el cual habla el interlocutor, re frasear y reflejar el sentimiento. La comunicación efectiva se logra luego de la credibilidad personal.  Hábito 6: Sinergizar: La comunicación sinergista garantiza la obtención de resultados en el ganar-ganar. Ésta incluye trabajar en un entorno creativo y confiable para lograr las metas compartidas. El aspecto principal para lograrlo es saber valorar las diferencias, ser conscientes y aceptar que dos puntos de vista pueden ser acertados aun cuando sean muy diferentes. La ventaja de obtener de aquello un acercamiento es la obtención de una tercera alternativa. Como herramientas de apoyo, Covey sugiere realizar una lista de las personas que más nos irritan y preguntarnos si podríamos crear una sinergia con ellos a modo de reto. También necesitamos identificar las situaciones que demandan más sinergia en un equipo de trabajo y favorecer las condiciones. Como último aspecto un consejo que se nos da es que cuando se presenten desacuerdos con otras personas intentemos entender sus profundas preocupaciones y su posición, luego tratar de dirigir el asunto a una solución de mutuo beneficio y de manera creativa.  Hábito 7: Afilar la sierra: Esto es por una metáfora en que un hombre invertía enormes cantidades de tiempo y esfuerzo en cortar árboles. Cuando le sugerían que afilara su sierra para hacer más eficiente su trabajo, se exaltaba diciendo que estaba muy ocupado cortando el árbol como para sacer tiempo e ir a afilar la sierra. Con esto se nos ilustran las “herramientas” que debemos “afilar”, las cuales son las cuatro dimensiones de renovación humana: Física (bienestar general en comer saludable, hacer ejercicio, dominar el estrés, espiritual (destinar tiempo para encontrar la paz y serenidad interior, mental (lectura, escritura, ver programas informativos, planear, organizarse), emocional (ayudar a los demás de manera significativa, lo cual incrementa nuestra seguridad intrínseca. La paz mental viene cuando la vida está en armonía con los verdaderos principios y valores en un estilo de vida interdependiente). El entendimiento de que hay un espacio entre la respuesta y el estímulo que puede ser rellenado por nosotros mismos, nos empodera a tomar control de nuestra vida. El cambio viene de analizar las raíces de nuestros pensamientos, que son el molde de nuestro carácter y de los paradigmas que empleamos. El mejor fruto que podemos obtener de la implementación de éstos siente hábitos en nuestro estilo de vida, es la unidad que obtenemos con nuestros amigos, seres queridos y con nosotros mismos. Construir un carácter con total integridad puede ser difícil pero no imposible. El proceso debe realizarse desde nuestro ser interior hacia el exterior. Es fundamental que centremos nuestras vidas en los principios correctos y que mantengamos un balance entre el hacer e incrementar nuestra habilidad para hacer (P/CP), de esta manera tendremos una vida útil y pacífica capaz de promover las mismas reacciones en todo nuestro entorno.

jueves, 27 de noviembre de 2014

El Poder de una Visión - Viedo

Que me llamó la atención? • El poder de la visión de futuro puede llegar a salvar vidas. Porque? • A pesar que la visión de futuro puede llegar a ser un factor de supervivencia también es la catapulta que nos eleva hacia el cumplimiento de nuestros senors. Que Aprendí? • A no limitar mi campo de visión, fisiológicamente tenemos un rango de visión un límite netamente físico, pero psicológica y mentalmente nuestro alcance es completamente ilimitado, el campo de visión depende única y exclusivamente de nuestra autoestima y autoconfianza depende de que tanto nos valoremos y de que tanto creemos que nos merecemos, es navegar en un océano interminable de ideas, sueños y anhelos. El hecho de otorgarle poder a nuestra visión nos hace indestructibles, podemos estar en las condiciones más paupérrimas e inverosímiles, pero si mantenemos la visión focalizada en nutra proyección del futuro ninguna condición externa por mas destructora que sea puede hacer mella en nuestro camino. La visión de futuro a nivel corporativo es esencial, el gerente tiene la responsabilidad de hacer que su equipo de trabajo logre la sinergia atreves de la visión de futuro compartida, los miembros del equipo de trabajo se deben sentir identificados con las metas corporativas futuras para que trabajen en pro de ellas, el hacer sentir a cada miembro como una pieza esencial en el funcionamiento de la compañía es un factor determinante en la medición de la eficiencia y la eficacia del desempeño empresarial. • Como lo pongo en práctica? No veré el río como un factor destructor que me aleja de mis objetivos, lo veré como el elemento que hace que aparezca la cuerda que me ata hacia mis sueños y felicidad, sin el río no tendría la necesidad de estar atado a la cuerda y llegar a la orilla de mi futuro, sin el río estaría en un estatus Quo que desdibuja y nubla mi visión de futuro y podría llegar a ni siquiera desear llegar a la orilla de mis sueños. Escribiré mis metas a corto mediano y largo plazo trazándome un plan de vida, tendré presente mis metas cada día y estaré en pro de que estoy haciendo día a día para lograr el estado en el que imagino viviendo en mi visión de futuro.